La alergia a la leche es una respuesta negativa del cuerpo al ingerir leche o cualquiera de sus elementos.
SIGNIFICADO BIOLÓGICO:
La leche está siempre relacionada con «mamá«. Siempre tendremos grabada en la memoria la leche materna como nuestro primer referente. Algo en la nueva leche (que nos produce alergia) nos hace recordar una mala alimentación durante la lactancia.
Puede ser por un problema de la madre durante la lactancia (alergia coyuntural) o que la madre tenga dificultades con su propia madre, lo que podría ser una cuestión heredada (alergia estructural). En este último caso la intolerancia aparece temprano, en las primeras lactancias.
También existe la posibilidad de que sea simbólico: El papel de la madre que no puede proporcionarnos comida debido a un conflicto. La madre también puede estar sufriendo de depresión, recibiendo tratamiento o estar ausente.
CONFLICTOS A BIODESCODIFICAR
La leche es vista como «madre«, es la comida de la madre.
Conflicto de separación y función materna. Conflicto de madre tóxica. Destete muy temprano, o realizado abruptamente.
Cuando se trata de un bebé, investigaremos el conflicto que la madre tiene con su propia madre. «Deseo estar fusionada con mi madre». «Amo a mi madre, pero deseo que esté lejos».
Si la intolerancia es solo al queso: «Desearía que mi madre fuese distinta» o «Necesito a mi madre, pero no a esta madre».
Cuando se trata de un bebé, debemos resolver el conflicto como madres primero, y luego, con todo el amor del mundo, se lo contamos al bebé mientras lo acariciamos y sostenemos.
Es crucial en casos de alergia identificar tanto el agente desencadenante como el conflicto programante y tratarlos.
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