Todo en el Universo es energía. En el mundo dual podemos hablar de 2 fuerzas principales: La fuerza centrípeta y la centrífuga. La fuerza centrípeta contrae y produce el sonido , el calor , la luz . La fuerza centrífuga es expansiva , es la fuente del silencio , de la calma , del frío y de la oscuridad .
El yang y el yin derivan el uno del otro : Las regiones frías , son yin , producen animales y vegetales yang . A la inversa , los animales y vegetales nacidos en regiones yang , es decir , cálidas son yin . De igual modo el ovulo producido por el sexo femenino (yin) es yang , mientras que , al contrario , el espermatozoide producido por el sexo masculino (yang) es yin .
Ambas fuerzas se manifiestan en todo el Universo y, por supuesto, también en el ser humano. Y cada una de ellas puede presentarse en exceso o en deficiencia… o estar ambas en armonía.
La física cuántica establece que la materia y la energía son intercambiables y, en consecuencia, que la materia es simplemente una manifestación de la energía. Esto significa que todo, incluidos los humanos, es simplemente energía almacenada en forma de partículas.
Por ende, toda la materia y los procesos psicológicos (pensamientos, emociones, creencias y actitudes) están compuestos de energía. Cuando se aplica al cuerpo humano, cada átomo, molécula, célula, tejido y sistema corporal está compuesto de energía que, cuando se superponen entre sí, crean lo que se conoce como el campo de energía humano.
FUERZA VITAL
La energía se refiere a fuerzas sutiles e imperceptibles, frecuentemente descritas como una fuerza vital que fluye a través del cuerpo. Dado que toda la materia y los procesos psicológicos (pensamiento, creencias, emociones y conciencia) están compuestos de energía, el cuerpo físico es, por lo tanto, la manifestación de un campo de energía.
Todo ser vivo late con el flujo de fuerza vital que impregna el universo. La vida es movimiento. Cuando este movimiento es perturbado, hay enfermedad. Un flujo de energía excesivo, deficiente, obstruido o falto de armonía, crea enfermedad o función anormal. A su vez, un flujo de energía equilibrado y coherente promueve la salud.
La energía puede aparecer tanto en forma de onda como de partícula. La forma de onda representa el potencial, mientras que la partícula es la forma manifestada de uno de esos potenciales. La observación que colapsa ese potencial en forma física proviene de nuestras experiencias, condicionamientos, expectativas, pensamientos y creencias.
El cuerpo físico es, por lo tanto, una forma manifestada de potencial en forma de partículas.
EL CUERPO ENERGÉTICO
El cuerpo energético está compuesto de canales de energía, a menudo llamados «Meridianos» o «Nadis», y centros de energía, conocidos como chakras. Los chakras son como centrales eléctricas que proporcionan energía a los diferentes órganos del cuerpo físico visible. Básicamente controlan el buen funcionamiento de todo el cuerpo. Las dolencias mayores generalmente ocurren debido al mal funcionamiento de uno o varios chakras en el cuerpo energético, provocado principalmente por conflictos inconscientes no sanados.
Las condiciones del cuerpo energético afectan al cuerpo físico visible y viceversa. Si el cuerpo energético se ve afectado, perturbado o dañado por cualquier medio psicológicos (pensamientos, emociones, creencias y actitudes), el cuerpo físico visible también se verá afectado.
¿CUÁL ES LA CONEXIÓN ENTRE PENSAMIENTOS, COMPORTAMIENTOS Y ENERGÍA?
Los investigadores saben desde hace mucho tiempo que los pensamientos y los comportamientos afectan los ritmos de su cuerpo.
Por ejemplo, los pensamientos ansiosos desencadenan la liberación de hormonas del estrés que estimulan el ritmo cardíaco para que se acelere o desacelere. Asimismo, las vibraciones sonoras de la música afectan los pensamientos, las emociones y los sistemas corporales.
Sin duda existe una fuerte conexión entre tu mente y tu cuerpo. Ciertas emociones y patrones de pensamiento, como la alegría, la paz y la aceptación, crean vibraciones de alta frecuencia, mientras que otros sentimientos y mentalidades (como la ira, la desesperación y el miedo) vibran a un ritmo más bajo.
Hay mucha evidencia que relaciona las emociones positivas y los patrones de pensamiento con una mejor salud y un mayor logro de metas.
La respiración profunda, la meditación, el yoga y la meditación pueden armonizar su energía. Interactuar con la naturaleza, comer una buena dieta, desarrollar relaciones saludables y practicar la gratitud y la generosidad también puede ayudar. Sin embargo, para una sanación real, es fundamental sanar las heridas y los programas tóxicos inconscientes.
El coaching neurobiológico es una mirada holística. Entiende que los problemas de salud, las frustraciones reiteradas y una vida sin plenitud, son causados por desequilibrios de funciones básicas que provocan síntomas de malestar. No sólo a nivel físico, sino en todos los niveles de la persona. Si solo trata los síntomas aparentes, la curación no será completa ni sostenible. Sin corregir los desequilibrios subyacentes, no puede recuperarse y obtener un bienestar óptimo a largo plazo.