Varices (inflamación venosa) localizadas en el recto y el ano. Aparecen unos bultos tipo almohadillas que producen dolor en el ano y sangre de color brillante en las heces.
SENTIDO BIOLÓGICO: Las hemorroides son varices en el ano. Hay una necesidad de mejorar riego ahí donde reposa mi parte sensible al sentarme (mi identidad, mi lugar). Una variz aparece en la fase de reparación de un conflicto de venas (desvalorización en la familia y suciedad que hay que limpiar) y en el ano (fase activa de un conflicto de identidad). En fase activa se ulceran para aumentar el cauce venoso que lleva la sangre a ser limpiada, y es en fase de reparación que se retuercen y aparecen las varices.
CONFLICTO: Conflicto de identidad y de marcaje de territorio (ano). El conflicto de territorio en relación al ano equivale a: “Donde pongo el culo”.
La palabra clave es “mi sitio” ¿Donde me siento? ¿Sé cuál es mi sitio?
Las hemorroides de las embarazadas responden al pensamiento inconsciente de dudar de su sitio: “¿Cuál va a ser mi sitio ahora que viene el niño?”.
Conflicto de rabia por el pasado, con mucho temor a soltarse por la sensación de llevar todavía muchas cargas (de territorio sucio y familia) y no poderlas manejar: «Me dan por el culo y puede que esto siga si no vigilo».
Aparecen en fase curativa del conflicto de territorio, o sea: “cuando se encuentra el sitio”.
Miedo a ser abandonado por la madre o duelo no hecho respecto a la madre.
No quiero volver a casa (familia de sangre), es una mierda llegar a casa.
Hemorroides internas: “Aquí no puedo soltar el pedazo (la guarrada que me hicieron y todavía siento), no es mi territorio”.
Miedo de los plazos establecidos. Rabia por el pasado. Temor a aflojarse. Sensación de carga.
Las hemorroides son una indicación de presión creada por estados emocionales y por temores que no se quieren mostrar ni de los cuales se quiere hablar. Esta represión llega a convertirse en una carga. Se manifiestan en la persona que se obliga, que se crea una presión, sobre todo en el aspecto material. Por ejemplo, puede ser una persona que se obliga a hacer un negocio que realmente no le gusta. Como las hemorroides se sitúan en el recto, que es la parte terminal del intestino grueso, la persona que las padece puede ser del tipo que se obliga a terminar algo. Se exige demasiado.
La tensión se crea principalmente por querer «tener» algo o a alguien, a causa de una inseguridad material y una dificultad para tomar decisiones. Cuanto más fuerte sea tu actitud interior de inseguridad, más sufrirás de hemorroides. Para aliviar esta inseguridad, te obligas a «hacer» para «tener».
Las hemorroides me indican una tensión y un deseo interior de forzar la eliminación, como si intentase de hacer salir algo muy fuertemente; al mismo tiempo, la acción de retener se manifiesta. El conflicto entre empujar y retener crea un desequilibrio. Las venas permiten suponer una situación indicando un conflicto emocional entre la acción de rechazar y de repulsar y la acción de querer retener y bloquear la emoción en el interior suyo.
Seguramente vivo estrés, sobrecarga de presión con relación a la cual me siento culpable. Quizás tengo plazos que respetar y tengo mucha dificultad en soltar, hacer confianza y puedo sentirme obligado a cumplir mis obligaciones y mis responsabilidades incluso si lo que quiero, es hablar y expresar mis necesidades para rectificar o ajustar algunas situaciones. Además, llevo este peso solo porque el orgullo que vivo me incitará a no pedir ayuda a nadie. También puede que viva un sentimiento de sumisión con relación a una persona o a una situación en que me siento disminuido, como si fuera una nulidad.
ACLARACIÓN: Ésta es una orientación genérica, se requiere investigar, en cada persona en particular, el pack conflictivo específico a resolver.